"La biodiversidad se protege con diversas medidas, como su conservación estricta mediante áreas protegidas, el uso y manejo sustentable de sus recursos; prácticas amigables con el ambiente -como ecoturismo, la ganadería, pesca y agricultura sustentable-; reduciendo los llamados incentivos perversos que son aquellos que logran el efecto totalmente contrario al que se pretendía de ellos y que afectan a la biodiversidad como los subsidios al gas, petróleo, pesca, agricultura; la educación ambiental para difundir la necesidad de conservar la naturaleza en las generaciones futuras, dando participación al publico y generando y difundiendo informacion constantemente sobre proyectos que pueden tener un negativo impacto sobre el ambiente, instituyendo las evaluaciones de impacto ambiental como requsito obligatorio ante la intención de ejecutar tal clase de proyectos". Ana Di Pangracio, Coordinadora de Conservación de FARN (Fundación Ambiente y Recursos Naturales), quien participó de la conferencia de ONU sobre Biodiversidad, que acaba de terminar en Nagoya, Japón.
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